jueves, 21 de febrero de 2013

Los exóticos viajes de Vjeran Simunic

Cuando uno se encuentra un croata por las calles de Bandar Seri Begawan, capital del pequeño sultanato de Brunei, piensa que está allí por turismo, visitando las tumbas de los antiguos sultanes o las pomposas y rococas mezquitas de la ciudad. Sin embargo, pronto uno se da cuenta que lo que ha llevado allí a este croata de 58 años nada tiene que ver con viajes de ocio. Se ha convertido en una especie de héroe para el país, de apenas medio millón de habitantes. Y esto no es fácil en una nación sin apenas pasión por los deportes, en los que el fútbol se intenta hacer hueco entre el rugby, el baloncesto, el golf y las artes marciales.

Tras una carrera irregular como portero en los setenta y ochenta, en la que no se asentaba en ningún equipo, el Tokio Verdy japonés acabó fichándole. De esta manera se convirtió en el primer europeo en jugar la liga japonesa. Apenas dos años en tierras niponas, para luego volver a Europa, jugando en Italia, Croacia y retirándose en Bosnia. No se puede decir que triunfó como jugador y quién sabe si se puede afirmar que tampoco lo ha hecho como entrenador. Entrenar a 27 clubs en su historia como mánager seguramente no hablará muy bien de él, pero como el mismo Simunic ha reconocido, él iba a los equipos para reflotarlos cuando estaban en una mala situación, no para hacer carrera en un solo club. Y es extraño, pero quizás donde más cómodo y contento se está sintiendo en su vida, es en este pequeño país asiático al que llegó en 2008 para entrenar al DPMM FC, el mejor equipo del país. Debido a que el potencial de la liga del país era demasiado bajo, el club decidió primero participar en la liga de Malasia para luego pasar a hacerlo a Singapur.

Sin embargo, en 2009 cuando la FIFA suspendió la Federación de fútbol del país, se prohibió asimismo que cualquiera de sus clubes disputara ninguna competición en suelo de otro país, lo que condenó al DPMM FC a no poder jugar fuera de su liga. Esto hizo que Simunic volviera a su tierra natal para entrenar de nuevo. Una vez levantado el veto en 2011 por parte de la FIFA, el club de Brunei volvió a ofrecerle el puesto de entrenador, que el croata aceptó gustosamente. Y el año pasado fue cuando empezó a hacer historia en el fútbol de Brunei, ya que consiguió vencer en la Copa de la Liga de Singapur y acabó segundo en la liga de ese mismo país. Tal fue su buena actuación, que fue nombrado mejor entrenador de dicha liga del año 2012 y como premio, la Federación de Brunei le obsequió con convertirlo en seleccionador nacional. Como curiosidad comentar que en la liga de Singapur se hace una carrera de 2,4 Kms. y todos los jugadores de la liga deben correrlo en 10 minutos y 15 segundos, a excepción de los porteros que pueden correrlo en 12 minutos. Si un jugador supera esa marca, se le declara no apto y no se le permite jugar. Además, se premia con dinero en metálico a los jugadores que lo hacen por debajo de 8 minutos y medio.

La primera final de Simunic con la selección de Brunei será muy pronto, cuando participen en la Clasificación de la AFC Challenge Cup, un torneo para las selecciones de países emergentes de Asia y cuyo ganador se le invita a la próxima Copa Asia. Su período de adaptación como seleccionador no deberá ser demasiado dificultoso, puesto que conoce a todos los jugadores del conjunto nacional, ya que son los mismos que los que él entrena en DPMM FC. Por tanto, el reto de este 2013 será por partida doble. Por un lado, llegar lo más lejos posible en la AFC Challenge Cup con la selección y, por otro lado, acabar lo más arriba posible en la liga con DPMM FC y quién sabe si conquistar un nuevo título en su historial.

La empresa con la selección no será nada sencilla, pues debe enfrentarse a tres rivales en teoría superiores a Brunei, como son Filipinas, Turkmenistán y Camboya. Y aún encima lo hará como visitante, puesto que la fase de grupos se juega en Filipinas del 22 al 26 de Marzo. Y para añadirle más dificultad, sólo el primero consigue clasificación directa para el torneo final, por lo que se ve prácticamente imposible, salvo sorpresa mayúscula, su clasificación. Simunic ya ha declarado que sólo llevará a jugadores de su equipo, menospreciando al resto de equipos de Brunei.

Su equipo, por otra parte, también se ha reforzado bastante bien y cuenta con 5 extranjeros en la plantilla que le pueden dar ese salto de calidad necesario para luchar por sus objetivos. Quizás el extranjero más conocido sea Stéphane Auvray, centrocampista de la isla caribeña de Guadalupe, que viene con experiencia de clubes de mayor nivel como Nymes, Sporting Kansas City o New York Red Bulls. A él habrá que sumarle un par de croatas (Bosnjak y Drpic), el portugués Joao Moreira, el brasileño Dos Santos y la nómina de jugadores locales que tan bien lo hicieron la temporada pasada.

Por @futdelmundo

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